Hace algunos años, autoridades y prensa anunciaron la apertura del “paso lateral”, un tramo de carretera alterno, de aproximadamente 10 12 kilómetros, paralelo a la Panamericana, construido para enlazar el sector de “Los Cañaverales” al norte de la ciudad con la zona de Chorlaví en las inmediaciones de San Antonio.
Ese tramo permitiría al transporte semi pesado y pesado que realiza su recorrido entre Tulcán y la frontera norte, con Quito y el interior del país: trailers, volquetas, remolques , tanqueros, camiones articulados, plataformas, etc…y tantos otros que circulan por nuestras carreteras cumplir su recorrido, evitando su ingreso a Ibarra.
El “paso lateral” significaría que los cientos de vehículos pesados que diariamente ingresan a Ibarra, congestionan el tráfico vehicular, aceleran el daño de la capa de rodadura de tres de nuestras principales avenidas: Mariano Acosta, Cristóbal de Troya, Eugenio Espejo, multiplicando la cantidad de baches que el Municipio no está en condiciones de reparar, dejarían de hacerlo, prolongando la vida útil del asfaltado.
El paso lateral, abierto en buena parte, espera la decisión del MOPT, para concluir los trabajos. Estos permanecen suspendidos como si el Ministerio esperara que los ibarreños le recuerden, de manera permanente, la urgencia de construir este tramo de vía para evitar el daño a las avenidas urbanas de Ibarra. O para exigir que el MOPT se haga cargo de la repavimentación integral de las mismas, convertidas en parte integral de la E 35 por la falta de decisión del MOPT.
Jacinto Salas Morales
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