Los edificios de la capital se sacudieron y el cielo fue iluminado con luces azules.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus silgas en inglés) dijo que el terremoto de 7,1 tuvo el epicentro unos 11 kilómetros al suroeste del resort de Acapulco, Guerrero.
La alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, dijo que después de activar los protocolos de revisión, que incluyeron cuatro sobre vuelos en helicóptero, no hay reportes inmediatos de daños graves en la capital.
Sin embargo, en la capital mexicana, se han presentado apagones.
“No hay daños en Oaxaca, no hay daños en Puebla, no hay daños graves en Ciudad de México”, dijo el presiente de México, Andrés Manuel López Obrador, en una alocución televisiva.
Agregó que habló con los gobernadores y alcaldes para monitorear la situación.
En el vecindario Roma Sur, las luces se apagaron y los residentes salieron a la calle, algunos de ellos en ropa de dormir, según le contó un testigo a la agencia Reuters.
Algunos vecinos se agruparon bajo la lluvia, sujetando a niños pequeños y animales domésticos, demasiado preocupados como para regresar a sus hogares en la oscuridad.
“Fue terrible. Me recuerda al terremoto de 1985 cada vez que ocurre algo así”, contó Yesmin Rizk, vecino del barrio, de 70 años de edad.
El USGS dijo que el terremoto, que en un principio se midió como de 7,4, era superficial, lo que probablemente amplificó el efecto de sacudida.
Por su parte, el Servicio Sismológico Nacional de México, SSN, informó en su cuenta de Twitter que a las 22:00 hora local, se habían presentado 73 réplicas del sismo, la más grande de M 5.2.
El corresponsal de BBC Mundo en México, Marcos González, reportó que el Gobernador del estado de Guerrero informó de la muerte de un hombre causada por la caída de un poste. Hasta el momento sería la única víctima del temblor. BBC MUNDO