Las autoridades en Indonesia han declarado hundido el submarino de su armada con el que perdieron contacto el miércoles, cerca de la costa de Bali, y que tenía una tripulación de 53 hombres, a la que dan por perdida.
Equipos de búsqueda han recuperado escombros y objetos que se creen provienen de la desaparecida nave, según informa la editora de Asia de la BBC, Rebecca Henschke.
El jefe de la Armada del Estado Mayor, Yudo Margono, dijo que se habían encontrado partes del submarino y alfombras de oración cerca del lugar donde desapareció el KRI Nanggala.
Añadió que un escaneo también había detectado al submarino a 850 metros, más allá del límite de profundidad al cual podría sobrevivir.
“Encontramos varias piezas que se creen que son partes o componentes que estaban fijos al submarino y no se hubieran separado de la nave si no hubiese presión externa o una grieta en el lanzador de torpedos”, declaró Margono.
Entre la evidencia que encontró había un derrame de aceite y objetos que no pertenecen al público en general alrededor de un radio de unos 16 km, por donde no ha pasado ninguna otra nave.
“Por el testimonio de un extripulante del Nanggala y de la comunidad submarinista, se cree que todos estos (objetos) son del KRI Nanggala”, expresó el alto oficial.
“Con esta prueba auténtica hemos sido aconsejados a declarar el submarino perdido”, dijo, señalando que estarían pasando a la fase de “post hundimiento”.
“Nos preparamos para la fase de post hundimiento para la evacuación de los miembros de la tripulación. Es muy riesgosa y de alta complejidad”, expresó.
Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de sobrevivientes, contestó: “No sabemos sobre la condición de las víctimas porque no hemos encontrado ninguna de ellas. Así que no podemos especular”, y añadió, “Pero con (el descubrimiento) de estos artículos, uno puede llegar a sus propias conclusiones”.