Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés), emitieron un mandato este jueves por la noche por el que se exige que los ciudadanos estadounidenses y cualquier pasajero que venga de un vuelo del Reino Unido presenta una prueba negativa de coronavirus realizada en las últimas 72 horas para poder entrar al país.
La orden será firmado este viernes por el presidente saliente, Donald Trump, y entrará en vigor el 28 de diciembre de 2020, indicaron los CDC en un comunicado de prensa.
Las autoridades sanitarias del Reino Unido recientemente informaron del descubrimiento de una nueva cepa del virus SARS-CoV-2, que según los estudio preliminares podría ser hasta un 70% más infecciosa que las variantes anteriores.
Esta exigencia adicional de test “fortalecerá la protección al pueblo estadounidense para mejorar su salud y seguridad, y garantizar viajes internacionales responsables”, según la agencia.
“Las compañías aéreas tendrán que confirmar el resultado negativo de todos los pasajeros antes de embarcar y, si un pasajero decide no hacerse el test, podrán negarle el embarque”, han apuntado.
La aerolínea estadounidense Delta ya había comenzado ayer jueves a pedir a sus pasajeros un test negativo antes de embarcar; y United Airlines había anunciado que haría lo mismo a partir de lunes.
sta nueva medida afectará a un número relativamente pequeño de viajeros porque, en marzo, el presidente estadounidense, Donald Trump, ya restringió la entrada de extranjeros procedentes de Reino Unido, lo que redujo el tráfico aéreo entre ambos países en un 90%, de acuerdo a los CDC.
La nueva cepa del coronavirus ha provocado el confinamiento en el Reino Unido de más de 20 millones de personas.
Además, numerosos países de Europa, Asia, Latinoamérica y Oriente Medio han decidido suspender en los últimos días las conexiones aéreas con el Reino Unido. Noicia: TELEMUNDO